Chuck Merriman Sensei es uno de los pioneros del Karate en América.
Nacido el 8 de enero de 1933, en Waterford, Connecticut, se graduó en Bulkely High School, New London.
Mientras trabajaba en una empresa naviera (donde construían submarinos, “General Dynamics”), un compañero lo invitó a practicar Judo. Su entrenamiento comenzó en 1960. El club de Judo estaba en Norwich, también en Connecticut, y su director e instructor era Norbert Bellinger. Cuando se mudó a Nueva York, encontró un nuevo Dojo de Judo donde los hermanos Bernie y Bob Lepkofker, le permitieron entrenar allí a cambio de mantenerlo limpio, abrirlo y cerrarlo. En aquel Dojo conoció a quien sería su primer maestro de Karate, el maestro de Shito-Ryu, Chris DeBaise. En 1966, por diferencias con los hermanos Lepkofker, DeBaise decidió dejar de enseñar y presentó a Chuck Merriman con una de las leyendas del Karate: Peter G. Urban, alumno de Gogen Yamaguchi, Mas Oyama y Richard Kim. Urban sensei tenía su dojo en China Town y en aquellos días había una lista de espera de tres meses para entrar al gimnasio del maestro de Goju Kai. Como un favor personal hacia DeBaise, Urban acepta al joven Chuck Merriman en su escuela.
En 1994, conoce a Ei’Ichi Miyazato Sensei y desde entonces es uno de los miembros más importantes del Jundokan, la Casa del Gran Maestro de Asato.
A lo largo de su carrera competitiva, Merriman Sensei se destacó en todas las facetas del Karate, Kata, Kumite y también como entrenador del Equipo Nacional de USA de Karate.
Fue director del equipo Transworld Oil Karate; árbitro en Jefe en el Campeonato Mundial WUKO en Tokyo, Japón. Miembro del primer W.U.K.O y miembro del Consejo de Árbitros. También trabajó como guardaespaldas de importantes celebridades como Dianna Ross y Gene Simmons.
En el 2013 se celebró el 60° Aniversario del Jundokan Dojo en Asato, Okinawa, y tuve la fortuna de conocer a Hanshi Merriman en la Casa de Miyazato. Durante esos días, él tuvo la gentileza de ayudarme con mi Sepai kata. Mi estadía en Japón, ese año, no pudo haber sido mejor.
Ese mismo año, Merriman Sensei fue honrado con el 9° Dan en una hermosa ceremonia en el Hotel Orion de Naha. Una noche de gala, donde fueron distinguidos, también con esa altísima graduación, Mick Mancuso Sensei, Rune Ramanitrandrasan Sensei, Gsodam FriedrichSensei, Yurio Nakada Sensei, Kinjo Tsuneo Sensei y Gima Tetsu Sensei. Una noche histórica.
En 2018 volví a encontrarme con Merriman Sensei en Naha. Él es una persona muy agradable y conversadora. Su mirada infunde la paz y la calma, propia de un hombre sabio.
Una noche en el Dojo Bar, tuve el gran honor de que me invitara a su mesa. Allí estaba yo, un modesto karate-ka del fin del mundo, junto a una de las personas más influyentes en el mundo del Karate; un recuerdo que quedará por siempre en mi memoria.
Mi pasión por el conocimiento atendía a los siempre interesantes relatos del famoso autor Patrick McCarthy, quien esa noche, compartía nuestra mesa. Pero quizás haber leído sus libros, no dejaba lugar para nuevas sorpresas. Sin embargo, la presencia de Merriman Sensei, uno de mis héroes de la década del ´90, me mantenía alerta a cada palabra que el pronunciaba. Esa noche, yo estaba sentado a su lado.
Comencé tímidamente con preguntas generales pero la buena predisposición de Hanshi Merriman, me permitió tomar coraje y seguir preguntando.
1- ¿Sensei, a qué edad y con quién empezó en las artes marciales?
CM: Comencé mi entrenamiento de artes marciales en judo a los 26 años en Norwich Connecticut.
2- ¿Qué dijeron sus padres sobre su interés por estas artes de lucha, tan cargadas de mística en aquellos días?
CM: Mi madre siempre apoyó mucho mi amor por las artes marciales y a menudo venía a verme competir.
3- Usted fue guardaespaldas de reconocidas celebridades de los años 70 y 80, ¿puedes contarnos alguna anécdota de esos días?
CM: Tengo muchos recuerdos de aquellos días. Cuando era el guardaespaldas de Gene Simmons (KISS), me acuerdo que estábamos de gira por Europa y en Italia ocurrió un incidente con un grupo hostil que quería causar problemas en el concierto. (Te enviaré el artículo de periódico que lo cubre). Fue hace casi 40 años, en septiembre de 1980, durante la gira “Unmasked Tour”. Iron Maiden abría el concierto. Había 30.000 personas esa noche en el Motovelódromo Vigorelli de Milán, Italia. El espectáculo se detuvo media hora pues, un grupo político de izquierda intentó tomar el control del escenario. Recuerdo que nos arrojaron un cóctel Molotov al escenario y otro al generador.
Junto a George Sewitt y varios otros guardaespaldas sacamos a la banda del escenario hasta que la policía finalmente logró sacar a los activistas del escenario y del estadio y el espectáculo pudo continuar. ¡Definitivamente fue una noche para recordar!
4- He visto fotos suyas con Yamaguchi Gogen, ¿cuáles son las diferencias que encontró entre el karate de Okinawa y el japonés?
CM: No fui alumno directo de Gogen Sensei, pero entrené un poco con él cuando vino a los Estados Unidos a finales de los 60.
La principal diferencia para mí es que el Okinawa Goju Ryu destaca el estudio del Kata y el Bunkai mientras el Goju Ryu japonés hace más hincapié en la práctica de Ju Kumite y la competición.
El Okinawa Goju Ryu es el Karate del “por qué“. El Goju Ryu japonés es el Karate del “cómo“.
5- Sé que estuvo en Buenos Aires ¿Pudo recorrer la ciudad?
CM: Sí, estuve en Buenos Aires en 1995, mientras entrenaba al equipo estadounidense de Karate en los Juegos Panamericanos. No pude ver mucho de la ciudad, debía entrenar al equipo para la competencia. Recuerdo que pude comer deliciosa comida argentina y conocer gente maravillosa, cálida y amigable. ¡Ojalá hubiera podido ver más de la ciudad!
6- ¿Cuándo conoció a Miyazato? ¿Cuál fue su primera impresión de él? ¿Tuvo la oportunidad de hablar con él sobre dónde y cómo conoció a Miyagi Chojun?
CM: Conocí a Miyazato Ei’Ichi Sensei a principios de los 90 cuando viajé a Okinawa para entrenar durante tres semanas en el Jundokan. El sensei Patrick McCarthy tuvo la amabilidad de darme una carta de presentación.
Mi primera impresión de él fue que era muy distante. Más tarde me di cuenta de que era porque apenas me conocía. Al pasar el tiempo, a medida que fue conociendo mis intenciones, fue muy amable conmigo y muy generoso al enseñarme.
Hablé muchas veces con él sobre su formación inicial con Miyagi Sensei y cómo el entrenamiento fue físicamente muy difícil.
En ese momento Iha sensei, Minei Sensei, Hichiya Sensei, Omini Sensei, Yasuda Sensei, Sekichi Kinjo Sensei eran los principales senpai en el Dojo.
7- Usted conoció a varios alumnos directos de Miyagi Chojun quienes habían estado entrenando desde antes de la Segunda Guerra, ¿tuvo la oportunidad de hablar con ellos sobre sus impresiones del karate de antes de la guerra y el que vino después? ¿Tuvo la oportunidad de hablar con Sakiyama Roshi sobre las diferencias del Karate enseñado por Miyagi y el que, tras su partida, enseñaron sus principales referentes, Seiko Higa, Meitoku Yagi, Toguchi Seikichi y Miyazato?
CM: Aparte de Miyazato Sensei, otros estudiantes de Miyagi Sensei fueron Iha Koshin Sensei y Kinjo Sekichi Sensei.
Hablamos de vez en cuando sobre las diferencias de Goju Ryu antes y después de la guerra, como el inicio de los Kata y la forma en que Miyagi Sensei enseñó Kata.
Mis discusiones con Sakiyama Roshi generalmente se centraban en su entrenamiento inicial con Miyagi Sensei y la interrelación entre Goju Ryu y el Zen. También la importancia de Sanchin Kata en lo que se refiere al entrenamiento Zen.
8- He leído que Iha Sensei fue notario de una reunión muy importante en 1955, donde se eligió al sucesor de Miyagi Chojun.
¿Le dijo Iha Sensei quiénes estuvieron presentes en esa reunión?
CM: Sí, Iha Sensei me envió una carta. En ella se menciona que fue una reunión de los estudiantes de los últimos años de Miyagi Sensei y que el presidente de esa reunión fue Mandanbashi Sensei.
9- ¿Cuáles son sus impresiones sobre el karate?
¿Crees que el kárate olímpico será una fuerza impulsora del kárate tradicional o una pesada ancla?
CM: Para mí, los preceptos del Okinawa Goju Ryu son tal cómo vivo mi vida: ¡Karate no es lo que “hago” es lo que soy!
En cuanto al “karate” olímpico, personalmente desearía que le dieran un nombre diferente, no creo que sirva para nada.
10- ¿Cómo imagina al KARATE en 100 años?
CM: Probablemente fomentando o intentando perpetuar el crecimiento del Karate tradicional o Dento Karate, ya que lo visible, el karate deportivo, es diametralmente opuesto, tanto en el propósito de su entrenamiento como en los resultados deseados de ese entrenamiento.
Siempre les digo a mis estudiantes: “Sean tan duros (GO) como el mundo los haga ser, pero sean tan suaves (JU) como el mundo les permita ser“
¡La práctica de Karate me permite tomar esa decisión!
Había sido un día intenso en mi vida como karate-ka. Playas, caminatas, entrenamiento en el mítico Jundokan, reuniones con amigos de todo el mundo y al final de la jornada, el fresco sabor de una cerveza en el mítico bar del cruce de la 29 y la 251 en Asato. Okinawa es un lugar fascinante para quienes pretendemos entenderla al menos superficialmente.
Salí del Dojo Bar. El cielo brillaba de estrellas y yo, esa noche, había estado conversando con una de las personas más brillantes y sabias de nuestros días.
Actualización
El lunes 18 de octubre de 2021 recibí la noticia de que Hanshi Merriman había fallecido en la localidad de Glendale, Arizona, donde vivía con su encantandora esposa Lil. La noticia devastó al mundo del Karate y no he sido yo la excepción. La contribución al deporte, a la formación de instructores con valores éticos, su pasión y su ejemplo de una vida de dedicación exclusiva, perdurará por siempre en la historia. Jorge Luis Borges decía: “La muerte implica una vida vivida”. Hanshi Merriman vivió su vida educando, formando, dando el ejemplo. Nuestro corazón acompaña a su familia y a sus alumnos que, también eran SU FAMILIA.