Capítulo II
Shō Hashi
Shō Hashi (尚巴志, 1372 –1° de junio 1439), nació en el Castillo de Sashiki-Jo. Hijo de Shishō y la hija de Misato, se destaca como buen administrador y excelente estratega. Fue el último Rey de Chūzan y el primero de Ryūkyū. Su nombre chino era Shang Bazhi. También se lo conoció como Sejitaka-mamono (勢治高真物). Su esposa fue Machirugi y tuvo al menos siete hijos.
El Reino estaba devastado por las guerras internas que desde 1372, enfrentaba a las facciones del Norte, el Centro y el Sur.
Hashi derroca al jefe de Chūzan, Bunei, en 1404 y coloca en el trono de Urasoe-Jo a su padre Shishō en 1405. Sin embargo mantiene el poder poniéndose al frente de su ejército.
Mientras tanto, el Castillo de Nakijin en la península de Motobu, seguía siendo una amenaza militar. Cuando en 1419 tres Aji de Hokuzan se ponen de su lado, Hashi dirigió el ejército de su padre al Norte y conquistó Nakijin-Jo en una rápida serie de ataques.
El jefe de Hokuzan se suicida junto con sus criados más cercanos, después de presentar una feroz resistencia y al final del día, Hashi retoma el poder en las tierras del Norte.
Unos años después en 1421, muere su padre y Hashi solicita el reconocimiento oficial y la investidura de la corte imperial china.
En 1428, el Emperador Zhu Zhanji (朱瞻基), primer Emperador de la Dinastía Ming, le otorga el apellido Shang (Shō en japonés), y registra un nuevo título: Liuqiu Wang (琉球 王: Ryūkyū-Ō), es decir, Rey de Ryūkyū.
La tablilla de laca con la palabra Chūzan del portal de ingreso al Castillo de Shuri, fue un regalo del Emperador chino a Sho Hashi.
En 1429 logra tomar el castillo de Nanzan, el Shimajiri Osato gusuku del Señor Feudal Taromai, y con esto da fin al Período Sanzan o de los “Tres Reinos”. Shō Hashi establece el reino de Ryūkyū, con capital en Shuri, sobre un castillo que construye en 1416.
La gente de Chūzan adopta rápidamente muchos elementos de la cultura china y esto le permite ser reconocida como “civilizada” por los chinos.
Hashi también supervisó la expansión y el embellecimiento del Castillo de Shuri, la colocación de marcadores de distancia en toda la isla, marcando la distancia hasta Shuri. Mejoró los caminos y terminó con las luchas tribales. El sistema feudal del período anterior no cambió, pero se promovió la expansión del comercio, tanto con China, como con Siam y Japón. El entendía el comercio como instrumento de prosperidad para Ryukyu.
Desde Shuri ordenó colocar una campana de fundición con la inscripción:
“Los barcos son medios de comunicación con todas las naciones, el país está lleno de productos raros y preciosos tesoros.”
Las relaciones diplomáticas y comerciales con otras naciones, permitieron que la cultura de su isla adquiriera características propias.
Shō Hashi muere en 1439, a la edad de sesenta y ocho años, habiendo unido a Ryūkyū y establecido una potencia pequeña, pero reconocida, en la región.
A su muerte, la corte nombró a su segundo hijo, Shō Chū, como sucesor, y envió emisarios a las cortes de China, al Shōgun japonés en Kioto y a los tribunales de varios otros reinos, para solicitar el reconocimiento del nuevo Rey.
Fue enterrado en Tenzan Yōdore, pero años más tarde sus restos y los de su familia fueron llevados a Yomitan.
Bibliografía
Richard Pearson; Ancient Ryukyu: An Archaeological Study of Island Communities
Kerr, George H. y Mitsugu Sakihara. (2000); Okinawa, the History of an Island People: The History of an Island People